El naranjo es uno de los árboles más típicos del mediterráneo, siendo utilizado dentro de la jardinería, no solo por su fruta, sino también por el color de sus hojas.
A la hora de elegir un naranjo es importante tener en cuenta la variedad que compramos. Según la variedad tendremos naranjas en el mes de noviembre o en el mes de junio. De esta forma, si tenemos la posibilidad de poner dos naranjos, se aconseja poner dos variedades para que su fructificación sea diferente.
Cuando hablamos de poda de naranjos tenemos que tener en cuenta que dependerá de la situación que tiene el árbol en el jardín. En general se suele practicar podas livianas, intentando clarear los chupones que salen de dentro, y pinzarlo desde dentro a arriba según la altura que queramos que llegue a tener en el jardín.
A la hora de cultivar la tierra que esta al lado del árbol, se hace muy superficialmente ya que sus raíces son muy sensibles, y si profundizamos mucho podríamos dañar sus raíces.
A la hora de abonar el árbol tendremos que controlar muy bien el nitrógeno, ya que la naranja tiende a tener clorosis férrica sobre todo aquí en Mallorca.